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Veamos algunos detalles de estas tendencias que marcaran la parada durante este 2021:
Shabby chic:
Se ajusta más a lo simple, aunque recurra a combinar lo viejo y lo nuevo. Sus claves están en manejar tonos claros o pasteles, muebles viejos, pero restaurados e incluir elementos como maderas, alfombras, textiles con sutiles estampados de flores y sin temor hay que incluir materas y plantas. El punto es buscar calidez. La luz es clave, siempre hay que buscar buenas fuentes.
Si queremos irnos por esta línea, que también se conoce como el country chic, no deberíamos pensar en incluir muebles metálicos ni mucho menos plásticos.
Si lo que buscamos es ver un espacio un poco más industrial, se permite recurrir a detalles como estructuras con óxido, ladrillo expuesto y cemento. Esto se complementa con elementos como maletas viejas, un bombillo que “cuelga” de un cable, teléfonos antiguos o libros. A diferencia de lo que exponíamos unas líneas previas, aquí el shabby chic no funciona con cojines o imponentes cortinas.
Boho chic:
También es conocida como la tendencia étnica. Si antes su color predominante era el marrón, para este 2021, también se complementa con el blanco, el negro, el mostaza, tonos tierra y el verde.
Ya a partir de los colores, los elementos toman relevancia. Estampados geométricos o tribales funcionan muy bien y preferiblemente se podrían usar en cojines (en el sofá o en el piso) o detalles pequeños para no caer en el extremo de la saturación de nuestros espacios.
El ratán, el mimbre, la madera natural complementan muy bien esta tendencia. Además, es preferible que los muebles sean bajos (por ejemplo, los tipo puff) y no lleven muchas patas.
Japandi:
Si bien ya se ha venido trabajando, para este año toma fuerza. Se trata de un estilo japonés con toques nórdicos. Esta tendencia busca transmitir mucha calma y por ello, los materiales naturales (o que sean biodegradables o reutilizables) tienen con mucha relevancia. Arcilla, madera clara en contraste con concreto o ladrillo.
Así mismo, los muebles con líneas limpias y tonos neutros que se complementan con accesorios sencillos como libros o canastas tejidas, hacen de esta tendencia una de las más destacadas.
Dark:
Predominan los elementos oscuros, no solo en las paredes sino en los detalles como los muebles, sus manijas, grifería o en los mismos objetos.
El minimalismo, una tendencia que se mantiene
Esta nos lleva a traer a nuestros espacios la calidez con materiales naturales. Los muebles tienen formas suaves y texturas delicadas en tonos claros.
Y sin alejarnos de cada una de estas tendencias y estilos, la biofilia también es una característica fundamental por estos tiempos, es decir, contar con las plantas (o masas vegetales) en nuestros espacios domésticos. Cómo no incluirlas si nos ayudan en nuestro estado de ánimo, relajan y, por supuesto, llenan de verde y vida el hogar.
Las plantas en la cocina o en los baños son una excelente manera de aplicar esta tendencia y más ahora con mayor razón.
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